Se acerca el día de los enamorados y cada vez está más de moda. Aprovechar un evento extranjero como excusa para hacer un regalo es una forma bonita de demostrar a las personas que te importan que piensas en ellas.

Es cierto que los regalos son el plato fuerte en el día de San Valentín, pero no debemos dejar de lado la presentación del mismo. Esto es como en un restaurante, el primer sentido que utilizamos es la vista, por lo que podemos afirmar que el envoltorio sí que importa.

La cuestión es dar en el clavo con el envoltorio adecuado a cada producto. No sería lógico, por ejemplo, empaquetar un anillo de compromiso en una lata de refresco. Pero una lata de refresco sí que puede ser el envoltorio perfecto para unos lápices de colores. Es así de sencillo.

Empaquetado para perfumes

Uno de los regalos de San Valentín por excelencia son los perfumes. Y no es de extrañar, ya que muchas empresas optan por promocionar ofertas de fragancias de marca con descuentos exclusivos para esta fecha.

Una forma divertida y especial de envolver los perfumes es dentro de una caja con el formato de la fruta cuyo aroma tiene el perfume. Es decir, si el perfume es dulce como el chocolate, el envoltorio ideal es una caja que parezca una tableta de chocolate. Si el perfume es más ácido, podemos crear una caja con forma de limón.

Lo importante es reflejar en el envoltorio alguna característica del perfume sin dejar ver cuál es el regalo. También se puede jugar con las características personales del perfume. Si es una fragancia seria, para hombres de negocios, podemos colocarla dentro de un pequeño maletín.

Cómo envolver ropa de forma original

La ropa es un regalo muy común a la hora de hacer regalos. Incluso hay algunas prendas como los foulares que siempre son un acierto, ya que no hay que elegir talla y se puede obsequiar un artículo con un diseño básico que puede ser además unisex.

El envoltorio de este tipo de artículos suele ser siempre una bolsa donde se ve la marca del lugar y, de esta forma, se pierde la sorpresa. Lo ideal es que la persona que recibe el regalo no pueda saber qué es hasta que lo abra.

Si estás interesado en la papiroflexia, aquí tienes la forma perfecta para recubrir tu regalo. Elije una prenda de vestir que te guste o que te resulte divertida y crea una bolsa con ese formato. Por ejemplo, si quieres regalar una corbata, crea una funda con un vestido de flamenca muy llamativo. Es así como el hombre puede recibir un regalo un tanto confuso y sorprenderse con lo que hay en el interior.