La lámpara de mesa Spacewalker tiene un diseño muy original que provocará sonrisas con sólo verla. El enorme cabezón del hombrecillo nos hace imaginar el casco de un astronauta, de ahí suponemos que le viene el nombre a la lámpara.
La luz suave del diseño de Constantin Wortmann para la firma Dark es ideal para iluminar y decorar una habitación infantil. Y a los niños les va a encantar, porque de pequeños todos hemos soñado alguna vez con ser astronautas, ¿verdad?
Por experiencia propia os puedo decir que cuando trabajas delante de un ordenador y te entra sueño es muy difícil escapar de los brazos de Morfeo. Y por eso estas tazas me han parecido tan curiosas, porque es una “herramienta” propia del trabajo la que va a conseguir que te despiertes y recobres la energía.
Es verdad que quizás estás tazas sean un poco frikis pero no me podéis negar que por su diseño y por lo que representan este juego de café es ideal para una empresa de informática.